La primera cabeza en ser guillotinada fue la del entrenador Mariano Soso. Horas después, Rubén Capria e Iván Borghello, integrantes de la dirección deportiva de la institución, también certificaron sus salidas y despidieron al plantel en Bella Vista.

Sin embargo, antes de que eso sucediera se produjo un episodio caldeado entre Ignacio Astore, presidente de la institución, y el “Memo”. A raíz de un planteo del dirigente, Borghello montó en cólera y quiso tomarlo a golpes de puño, por lo que fueron separados de inmediato.

Todo esto se dio el mismo día que Cristian “Ogro” Fabbiani asumió como nuevo entrenador y ya estuvo a cargo de la primera práctica profesional.

Un caldo que llevaba tiempo cultivándose

Este álgido intercambio solo fue la punta del iceberg de la mala relación entre Borghello y los dirigentes de la “Lepra”, según pudo averiguar Doble Amarilla.

En la derrota 2-0 contra Central Córdoba de Santiago del Estero, correspondiente a la 4ª fecha del torneo Apertura 2025 de la Liga Profesional, el ex jugador recibió una serie de insultos por parte de dirigentes.